La crisis económica obliga a los andaluces a migrar. Un nuevo servicio de la Junta de Andalucía, el Área de Gestión de Empleo Agrario, cuenta con un registro de 12.000 personas sin aparente vinculación previa con el campo dispuestas a desplazarse a las provincias agrícolas de la comunidad para participar en las campañas de recolección.
Así lo admitió ayer el Foro de la Inmigración en Jaén, órgano constituido con el objeto de atender en la campaña de recolección de aceituna las necesidades de los trabajadores extranjeros, para quienes pone a disposición 800 plazas en 20 albergues. Se trata de una red que les proporciona de todo (techo, comida y cama) excepto empleo, por el que este año compite también la población autóctona.
La precaria situación económica de numerosas familias andaluzas les ha obligado a otorgar a la agricultura condición de asidero. Lo aclara el aumento de vendimiadores que han retornado a Francia este año y lo prueba el elevado número de inscritos en el Área de Gestión de Empleo Agrario, dispuestos a convertirse en jornaleros. Se trata de personas ajenas al régimen especial, presumiblemente procedentes de sectores en horas bajas, como la construcción.
El nuevo sistema facilita extraordinariamente las relaciones entre agricultores de toda la vida y campesinos a la fuerza, de modo que incluso tienen la posibilidad de llegar a un acuerdo para la contratación por vía telefónica.
Continua: abcdesevilla.es
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