Habéis sido redireccionados a esta dirección porque he cambiado el dominio del blog por el mío propio www.elmundodelolivar.es a sí que añadirlo ha favoritos si queréis seguir visitando el blog

martes, 13 de enero de 2009

Paro olivarero en Jaén por la caída del precio del aceite

COAG Andalucía denuncia que los olivareros andaluces han perdido 784 millones de euros en el último año (400 M€ en Jaén, 176 M€ en Córdoba y 79 M€ en Granada).

COAG Andalucía- Estas pérdidas se producen como consecuencia del descenso del precio del aceite de oliva, que en enero de 2008 se situaba en los 2,60 €/kg. y en enero de 2009 apenas alcanzaba los 1,80 €/kg. Estos 0,80 € menos por cada kilo amenazan seriamente la viabilidad de un sector que actualmente genera más del 30% del empleo agrario en nuestra comunidad y del que viven más de 300 municipios andaluces.

Un estudio detallado de los costes de producción de los diferentes tipos de olivar (a mes de Julio de 2008) demuestra que éstos se hallan entre los 1.500 €/ha y los 2.500 €/ha. Aplicándoles precios en origen de 2.1 €/kg, correspondientes a octubre de 2008, muchos olivares no serían rentables, pero con los precios actuales, de 1.8 €/kg., incluso el olivar más competitivo deja de ser rentable.

Por eso, COAG Andalucía convoca, el próximo 29 de enero, una jornada de paro olivarero en la provincia de Jaén. Es el pistoletazo de salida de una campaña de movilizaciones que pretende denunciar las prácticas especulativas y fraudulentas que se producen en el mercado de aceite de oliva, en el que tres grandes empresas controlan el 80% de las operaciones y ejercen su posición de dominio pagando a los productores precios que no superan el umbral de rentabilidad.

Si no existe una intervención de las administraciones para regular el mercado, la presión que están ejerciendo los grupos industriales sobre el mercado del aceite de oliva provocará un fuerte ajuste estructural de las explotaciones olivareras andaluzas, las cuales hasta la fecha han sido las más competitivas del mundo.

COAG pide al Ministerio de Medio Rural que consiga que la Unión Europea actualice y active los mecanismos de regulación establecidos en la OCM de materias grasas, tales como el almacenamiento privado. De ese modo, se contribuiría a romper la posición de dominio de las grandes industrias a la hora de establecer los precios. Esta medida, que consiste en retirar del mercado una parte del producto cuando dicho mercado presenta graves perturbaciones de los precios (más de dos semanas por debajo de un precio establecido), ha quedado obsoleta, porque los precios que la activan se basan en campañas de hace más de diez años, de ahí la necesidad de su actualización.

En estos momentos, las almazaras y cooperativas tienen un problema de liquidez, por lo que se ven obligadas a vender al precio que ofrecen las industrias, algo que cambiaría si pudieran acogerse a dicho almacenamiento privado.

También pedimos al Ministerio que solicite a la UE que se reconsidere la autorización de la comercialización de las mezclas de aceite, impidiendo que se venda como aceite de oliva algo que sólo lo es en parte. Exigimos que las etiquetas indiquen de forma precisa si lo que se vende como aceite de oliva incluye algún otro tipo de aceite vegetal. En caso contrario, se estaría cometiendo un fraude al consumidor, aunque dichas mezclas no sean perjudiciales para la salud, y se estaría tirando por tierra el continuo esfuerzo que realizan los olivareros para obtener un producto de excelente calidad.

En ese sentido, COAG considera que la Agencia del Aceite de Oliva debe aumentar el control sobre el sector industrial, mediante la obtención pormenorizada de datos de entradas y salidas y el aumento de los controles sobre los grupos empresariales, no sólo sobre las existencias y movimientos de aceite de oliva, sino también de las importaciones, entradas y salidas de los aceites de semillas. Todo ello redundaría en una mayor transparencia de los mercados y permitiría la realización del principal objetivo de la Agencia.

COAG también ve positivas las medidas que se están defendiendo por parte de la Consejería de Agricultura, que trabaja en la línea de concentración de la oferta para fortalecer al sector productor. Sin embargo, consideramos que eso no es suficiente para solucionar el grave problema al que se enfrentan los productores. Es necesario que desde Andalucía se consiga que el Ministerio, interlocutor en Bruselas, logre que la autoridad competente, que es la Unión Europea, escuche al principal productor de aceite de oliva, y pongan en marcha medidas como las reseñadas, absolutamente necesarias para garantizar el futuro de un cultivo emblemático para Andalucía.

* El sector del olivar andaluz

El olivo es un cultivo típicamente mediterráneo y de gran importancia para Andalucía, como queda patente en la amplia extensión que ocupa (más de 1.450.000 has., casi un 33% de la Superficie Agraria Útil). El olivar genera más del 30% del empleo agrario, con más de 250.000 olivicultores censados y más de 14 millones de jornales (más de 9 millones en la provincia de Jaén y otros 3.5 millones en la de Córdoba, para más de 85.000 y 40.000 trabajadores respectivamente, lo que permite hacernos una idea del poder de este cultivo como elemento fijador de población en el medio rural). El cultivo es el centro de la actividad económica de más de 300 municipios, principalmente localizados en las provincias de Jaén, Córdoba, Granada, Málaga y Sevilla. En los municipios de las zonas olivareras de estas provincias, el cultivo ocupa más del 50 % de la superficie total de los mismos, manifestándose en muchos casos como monocultivo.

A la gran superficie que ocupa también hay que unir el enorme peso económico que representa en la Producción de la Rama Agraria Andaluza: en 2008 ocupó el tercer lugar en importancia, tras las hortalizas y las frutas, aportando aproximadamente el 18 % de la PRA, el 21 % de la Producción Vegetal Andaluza y el 20 % de la Renta Agraria.

Además de su importancia económica y social, el olivar tiene un enorme valor medioambiental, como elemento de lucha contra la erosión, ya que por sus características está perfectamente adaptado a condiciones climatológicas y medioambientales adversas, lo que le permite colonizar zonas de gran pendiente y suelos pobres en las que no sería posible la implantación de otra alternativa de cultivo. En estos momentos, hay más de 511.000 has. en parcelas con más del 15 % de pendiente media, de las que unas 100.000 se localizan en zonas con pendientes medias superiores al 30 %. Por esta razón, el olivar de sierra se convierte en un elemento de gran importancia social y económica, cuyo abandono contribuiría al aumento de la erosión, el deterioro del paisaje y el desarraigo de la población en el medio rural.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tambien te puede interesar

Related Posts with Thumbnails